Este fin de semana se juntaban por primera vez, bajo el título un itinerario evangélico, la 18º promoción del CELAS Juvenil en La Salle Griñón (Madrid), entre ellos ocho participantes del Sector Valladolid.
El viernes arrancó con la acogida y una primera presentación más informal mediante alguna dinámica de conocimiento.
El sábado comenzamos el día poniéndonos en presencia y en camino mediante la Oración, plasmando aquellos objetivos que se quieren alcanzar en el CELAS. Y de ahí a la trama de mi existencia, un momento de tiempo personal para ahondar en las raíces de cada uno, momentos clave de la vida, personas que te van marcando, crisis y momentos de debilidad, ilusiones de futuro, etc… Dando así lugar a un rico momento de compartir toda esa vida en grupos pequeños. El día continuó con el itinerario lasaliano: Abraham, Juan Bautista de La Salle y un Cristiano de hoy, un primer tiempo de acercarse a la vida de San Juan Bautista de La Salle, destacar aquellos rasgos y actitudes de su vida y hacer lectura de ellas desde la vida de cada participante.
El día se completó con la presentación de dinamismos para un itinerario común en torno al Proyecto Lasaliano. Una oportunidad de conocer las calves de un proyecto,
sus posibles fallos y sus correspondientes soluciones, y más allá de todo eso, ser capaces de identificarlo en las realidades de cada uno. Para poner la guinda al día, dos de los participantes compartieron en forma de testimonio su experiencia de voluntariado internacional en verano en República Dominicana, ¡una gozada poder compartir experiencias tan ricas!
El domingo, tras la eucaristía, el Hno. Esteban captó la atención y el interés de todos los participantes con «Una espiritualidad para el camino«, dos claves muy claras: amar para seducir y para reducir, las dos van juntas, no se dan por separado si se trata de amar.
Muy buen sabor de boca y con ganas de reencontrarse en Diciembre.